A muchas personas les cuesta sonreír, sea por las complicaciones que se generan en la vida, o por la misma personalidad del individuo, pero nuestros clientes no tiene la culpa de ello.
La sonrisa como cualquier otro habito de la vida se puede entrenar y se entrena practicando y añadiéndola como una más de nuestras herramientas de trabajo.
La sonrisa llena la mente con pensamientos positivos, aporta ideas buenas, nos recarga de una buena actitud y buen humor.
Con la sonrisa haces que un cliente que ha entrado en tu negocio cambie de actitud sea más receptivo a comprar, además la sonrisa es contagiosa, te pone a ti de buen humor y también a los que te rodean.
La sonrisa abre puertas, desbloquea situaciones, hace sentir a quien entra en tu negocio que es bienvenido, que te alegras de que haya entrado en tu negocio.
La sonrisa es tan importante que incluso en los cursos de televenta y telemarketing aconsejan sonreír al teléfono, porque aunque no lo creas, tu voz se proyecta de manera diferente y el cerebro de la persona a la que llamas lo detecta y se acopla a la positividad.
Estudios científicos han demostrado los beneficios de sonreír. Nos ayuda a tener una actitud positiva, levanta el ánimo cuando uno se encuentra decaído. La sonrisa es una poderosa herramienta de auto ayuda; la sonrisa hace que nuestro cerebro segregue una serie de hormonas que ayudan al buen funcionamiento del organismo, asique te animo a sonreír.
Nuestras relaciones personales también mejoran con una sonrisa, ya que generamos buen rollo en los demás y transmitimos una sensación cálida de tranquilidad y de seguridad. Es importante en toda faceta de nuestra vida sea familiar, laboral, y personal. La sonrisa debería ser como una pieza más de nuestro vestuario, debe estar siempre presente en lo posible.
Sé que a veces es difícil, pero míralo de esta forma, quizás no podamos elegir nuestras circunstancias, pero siempre podemos elegir como nos enfrentamos a ellas
Así que práctica tu sonrisa y cuéntame cómo te ha ido, estoy seguro que será beneficioso.
En el post de hoy y como no podía ser de otra forma, me despido con una sonrisa.